Científicos de la UCLA en Estados Unidos han
simulado el tercer anillo para explicar sus características, entienden que son
partículas solares ultrarrelativistas muy energéticas que se rigen por una
física distinta a las partículas de los dos cinturones de Van Allen ya
conocidos. A diferencia de las poblaciones de electrones y protones con
energías más bajas, estas partículas ultrarrelativistas tienen una velocidad
muy cercana a la de la luz y son peligrosas para la integridad de los satélites
que orbitan el planeta.
Al parecer el efímero tercer cinturón estaba formado por poblaciones de partículas que
no se pueden considerar coherentes y reaccionaban de manera diferente a las
perturbaciones del espacio y también cambiaban a diferentes escalas de tiempo.
Todavía no se sabe cómo se aceleran esas partículas ni por qué escapan de la
acción de los dos primeros cinturones geomagnéticos.